El Nuevo Herald
Las barreras para bebés diseñadas con el fin de proteger a los niños pequeños no siempre son tan seguras como creen los padres, ya que un nuevo estudio afirma que casi 2,000 niños estadounidenses reciben tratamiento en urgencias médicas cada año debido a lesiones por subirse o caerse a través de dichos mecanismos restrictivos.
La mayoría de las lesiones no fueron graves, pero los investigadores dicen que los padres deberían estar enterados de las precauciones. Eso incluye usar barreras atornilladas, en lugar de las que sólo se montan aplicando presión, en la parte superior de las escaleras.
La investigadora Lara McKenzie y sus colegas en el Hospital Infantil Nationwide en Columbus, Ohio, examinaron datos de niños de hasta 6 años.
La cifra de los lesionados con esas barreras aumentó a más del triple en 20 años. Estos casos aumentaron de unos 4 por cada 100,000 niños en 1990 a casi 13 por cada 100,000 en 2010.
El estudio fue publicado el lunes en la revista Academic Pediatrics.
