Sprint Nextel interpuso una demanda para impedir que AT&T Inc. compre T-Mobile USA por US$39.000 millones, unos pocos días después que el Departamento de Justicia de Estados Unidos tomara medidas para bloquear la operación. El caso de Sprint fue presentado en un tribunal federal como un caso relacionado con los esfuerzos del Departamento de Justicia para impedir la transacción. Sprint se ha opuesto abiertamente a la operación, que la dejaría en una difícil situación competitiva frente a AT&T y Verizon Wireless, una empresa conjunta entre Verizon Communications Inc. y Vodafone Group PLC. Agregó que la adquisición elevaría los precios para los consumidores y clientes corporativos, además de consolidar el posicionamiento de AT&T y Verizon, que controlarían más de tres cuartas partes del mercado y el 90% de las ganancias si se aprueba la transacción. Se espera que el gobierno argumente que una combinación de la segunda y la cuarta mayores empresas de telefonía celular de Estados Unidos elevaría los precios y afectaría la innovación en un mercado de alta concentración. Empresas más pequeñas como Leap Wireless International Inc. y MetroPCS Communications Inc. también han solicitado que se impida el acuerdo. Las acciones de Sprint han perdido un 19% en lo que va del año.
