26 de septiembre de 2009
El Vocero
Según un estudio reciente encargado por Sears y Kmart, la deteriorada situación económica actual tiene a los consumidores de los Estados Unidos más preocupados que nunca por sus finanzas, situación que no es diferente en Puerto Rico. Se estima, que esta preocupación repercutirá en las ventas navideñas, que se proyectan como una de las más triste. El estudio reflejó, que casi seis de cada diez (58%) de los encuestados afirmaron estar más inquietos este año respecto al año pasado acerca de cómo van a pagar sus compras navideñas. El estudio indica que mucho más de la mitad (60%) de los hispanos encuestados están más preocupados acerca de cómo pagarán sus compras navideñas este año, ante lo cual casi tres cuartos (73%) de hispanos planean remediar esta situación ahorrando. Según el estudio, la situación se complica un poco más, cuando muchos de los consumidores optan por utilizar dichos ahorros para sus vacaciones y no estrictamente para la compra de regalos navideños. Más de la mitad de los consumidores de los Estados Unidos (56%) afirmaron que planean ahorrar dinero para las vacaciones de invierno de este año. De hecho, casi un tercio (32%) ya empezó a guardar dinero para este fin y un 38% planea empezar a ahorrar efectivo este mes o más adelante. Es claro que los consumidores tienen prioridades diferentes este año: casi tres cuartos (72%) planea hacer las cosas de manera diferente esta temporada navideña, ya sea gastar menos en regalos (57%), ir de compras a tiendas con precios más económicos (53%) o planear y establecer un presupuesto de compras (49%). Una prioridad que no ha cambiado: el deseo de regalar a una cantidad mayor de personas incluso en estos momentos económicos tan difíciles. Un 70% ciento de consumidores afirma que le gustaría dar obsequios a más personas pero piensa que no podrá permitírselo. En el caso de Puerto Rico, la historia parece ser similar, aunque no se contempla una caída en ventas tan grande como la estimada en los EE.UU. Economistas y comerciantes coinciden en que esta merma pudiese alcanzar entre un 5% a 6%. El economista Gustavo Vélez adjudicó esta merma en porcentaje de las ventas a dos factores principales: la economía subterránea y las transferencias federales de las que disfrutan un alto porcentaje de los puertorriqueños. Aclaró, que la merma responderá a unos indicadores que reducirán el ingreso disponible para las compras. Entre ellos mencionó los nuevos impuestos que entraron en vigor, la reducción de la nómina gubernamental, la pérdida de empleos en la empresa privada, la difícil situación económica de la banca, lo que reduce las posibilidades de facilitar préstamos y ampliar crédito, razones que afirmó no mejoran ingresos que puedan facilitar mayores compras. Esta tendencia esta siendo confirmada con las ventas acumulativas registradas entre los meses de enero hasta mayo, donde las misma están abajo por $283 millones, equivalente a un 2%, en comparación con el mismo periodo de 2008. Esta tendencia se mantiene desde el año pasado. En diciembre del 2008, las ventas alcanzaron los $3,484 millones, $65 millones menos que en el 2007. En un sentido muy similar se expresaron los comerciantes, quienes entienden esta deberá ser una de las peores Navidades en términos de ventas, ya que las personas optarán por regalar a un número menor de personas y reducir sus presupuestos. En ese sentido indicaron que tendrán que reinventar sus estrategias para poder competir. Entre las alternativas mencionaron el comprar a otros suplidores que vendan igual calidad de productos pero a precios más económicos, lo que les permitirá ofrecer mejores especiales. A ello sumaron ampliar la variedad de productos y servicios y facilitar acceso a sus negocios y gestionar el lanzamiento de ofertas y promociones.
