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DETROIT (AP) - Chrysler está recogiendo casi 870.000 SUVs porque la corrosión puede hacer que los frenos de los vehículos  se pongan más duros utilizar.

Jeep Grand Cherokee y Dodge Durango SUVs a partir de los años modelos 2011 al 2014  están implicados.

Chrysler dice que los empalmes de la encrespadura en los aumentadores de presión del freno pueden corroer si se exponen al agua. Si el agua congela, los aumentadores de presión no ayudarán a frenar como generalmente debe de suceder.

Chrysler comenzó a investigar después de algunos clientes se quejaron de haber   sentido demasiado firmes cuando estaban apretado los frenos. La compañía sabe de un accidente, pero de ningunas lesiones, debido al defecto.

Los distribuidores instalarán un protector para proteger los aumentadores de presión y  substituirá los aumentadores de presión que no están funcionando correctamente libre de costo.

Chrysler ha cambiado desde entonces el diseño para hacer los aumentadores de presión más resistentes a la corrosión.

Chrysler le notificará a dueños de los vehículos. También pueden comunicarse con su concesionario Dodge/Chrysler más cercano para coordinar la reparación.