Inicio  





 Lo Más Visto
- ¿Aguacates en peligro?: revelan la amenaza que se cierne sobre el 'oro verde'
- Alerta tras inundaciones: potencial aumento de casos de dengue y leptospirosis
- Multan a firmas de Slim por falta de permisos en cables interoceánicos
- Aerolíneas demandan al gobierno federal por norma que les exige transparencia sobre tarifas
- Retiran más de 1,300 cajas de habichuelas coloradas Goya distribuidas en Puerto Rico y Santa Cruz




  Por el libro
Bookmark & Share

23 de febrero de 2012

Yahoo

El Gobierno desea evitar el "drama humano" de los desahucios y estudia proponer a los bancos que admitan la entrega de la vivienda como forma de saldar la hipoteca para las personas con menos recursos, afirmó este miércoles el ministro de Economía, Luis de Guindos.

"El Gobierno es muy sensible a la situación que han generado el gran número de ejecuciones (de hipotecas) que están afectando a un gran número de ciudadanos. Esa situación es un drama humano", admitió De Guindos en el Congreso de los Diputados.

Para remediarla, el Ejecutivo del PP estudia presentar un "código de conducta" a los bancos, que será de carácter voluntario. Para las familias más vulnerables, "se debería permitir la dación en pago como medio liberatorio de la deuda", declaró el ministro.

Actualmente, el banco puede quedarse con la vivienda de un propietario que no puede pagar su hipoteca para venderla en subasta y tratar así de saldar la deuda. Pero, si el monto de la venta es inferior a lo que desembolsó en el momento de la compra el propietario, éste debe hacerse cargo de la diferencia.

"La triste realidad es que, para aquellas personas, la vivienda que entregan es sin duda el único bien que tienen y exigirle más allá de su única propiedad parece excesivo", añadió el titular de Economía. Bajo "un umbral de exclusión", las familias podrían también poder quedarse un tiempo en la vivienda antes de ser desahuciados, "un tiempo prudencial, como por ejemplo dos años", propuso De Guindos.

Según el ministro, este umbral podría cubrir a las familias en las que todos sus miembros activos están desempleados. Más de un millón y medio de hogares se encontraban en esta situación en 2011 en España. Golpeada por una tasa de desempleo del 22,85% de la población activa, la economia española lucha por superar las consecuencias del estallido de la burbuja inmobiliaria, a finales de 2008.

En los nueve primeros meses de 2011, se ejecutaron 42.894 desahucios en España, según las autoridades judiciales. Es más que en todo el año 2009 (con 33.918) y casi tanto como en 2010 (47.809). Uno de los símbolos de la crisis, estos desalojos de propietarios endeudados son el blanco de las críticas del movimiento de los 'indignados', que se movilizan cada cierto tiempo para impedirlos.