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10 de noviembre de 2008

Por: El Nuevo Herald


Adam y Anita Paulk tenían una bonita casa en las afueras de Temple, Texas, con un patio enorme y a 10 minutos del trabajo. Pero, en lo que se refiere a la internet, la casa estaba en la Calle de la Lentitud. No había disponible una conexión de internet de alta velocidad.


De modo que en el 2005 los Paulks recogieron sus bártulos y construyeron una casa en una nueva subdivisión. Estaba un poco más lejos del trabajo, pero por lo menos tenían una conexión de banda ancha (broadband).


'Valió la pena no tener que oír más a mi esposo pelear sobre la conexión', comentó Anita Paulk.


En menos de una década, la conexión de banda ancha ha pasado de ser considerada un lujo a convertirse en una necesidad para muchas personas, y, para algunas de ellas, ha comenzado a influir en sus decisiones de compra de propiedades inmuebles. Las viviendas que tienen acceso a internet de banda ancha están ganando a las más remotas que no tienen. Las áreas que tienen internet de banda ancha mejor y más rápida están haciéndose más deseables que las que tienen internet más lenta.


Edward Redpath, agente inmobiliario de Hanover, New Hampshire, dijo haber visto caerse ventas cuando el comprador se da cuenta de que una casa no recibe internet de banda ancha. Del otro lado del Río Connecticut en Norwich, Vermont, sólo el centro del poblado tiene cable.


'Tenemos muchas personas que no se van a los vecindarios rurales o que ni siquiera los tienen en cuenta porque necesitan internet de banda ancha', dijo Redpath. ``Nuestro estilo de vida exige velocidad'.


En eso entran en juego diferentes tendencias. Una es la de que nuestra dependencia del broadband está aumentando. Alrededor del 55 por ciento de los estadounidenses tienen internet de banda ancha en casa, según un sondeo reciente llevado a cabo por el Proyecto Pew de Internet y Vida Estadounidense, aunque más personas no compran el servicio aunque lo tengan disponible.


Pero la difusión de la internet de banda ancha se está haciendo más lenta. Conectar el último 10 por ciento o algo así que queda es una tarea costosa, porque se encuentran en comunidades pequeñas o lejos de otras casas. Con el tiempo, la falta de la internet de banda ancha universal, unida a la subida de los precios de la gasolina, podría hacer que la gente se mudara del campo hacia las ciudades y los suburbios.


Para conectar los hogares más distantes de Vermont en el área de Redpath, la compañía telefónica local, FairPoint Communications Inc., usará medios no convencionales. A partir del año próximo, usará conexiones inalámbricas para cumplir su promesa de brindar broadband a toda su área de servicio en el estado.


La cobertura de internet de banda ancha inalámbrica por las compañías de teléfonos celulares se está expandiendo también con mucha rapidez, pero continúa siguiendo las carreteras importantes y los centros de gran población. Incluso en el caso de que se pueda recibir, es más lenta que la banda ancha por alambre, y hay límites a la cantidad de download mensual.


Como último recurso, la internet de banda ancha de satélite está disponible casi en todas partes. Pero tiene límites estrictos en la cantidad de megabytes que un cliente puede bajar, y algunas actividades, como por ejemplo los juegos de internet, son imposibles porque la señal toma tiempo para viajar al espacio y regresar. De todas maneras, los satélites no tienen la capacidad para dar servicio a todos los que no pueden recibir internet de banda ancha por alambre.


Incluso en áreas urbanas, la internet de banda ancha se ha vuelto un factor importante para algunas personas cuando deciden dónde vivir, al menos si trabajan desde su casa.


Cuando Daniel Skripka comenzó a encontrar demasiado caro el downtown de Minneapolis, se puso a investigar los suburbios y se decidió por Chaska, que tiene una red municipal de internet que le cuesta $18 al mes. Skripka la usa como reserva para cuando está trabajando en casa y su conexión de DSL se descompone, lo cual sucede aproximadamente una vez al mes.


'El factor más importante para la ubicación fue la disponibilidad de servicios de internet confiables', dijo Skripka.


En los apartamentos de lujo, el estándar es tener al menos dos opciones de broadband, según Henry Pye, director de servicios a los residentes y tecnología de JPI Partners LLC, que tiene edificios en todo el país. Su trabajo consiste en asegurarse de que tengan internet de banda ancha, porque, afirmó, ya no se puede alquilar apartamentos que no tengan broadband.


'Se ha vuelto tan importante como el agua', dijo.


Andru Edwards, quien lleva el blog de tecnología Gearlive.com, se mudó el año pasado de Seattle a un suburbio para poder recibir la conexión por cable de fibra óptica de Verizon Communications Inc. El tenía un módem de cable en su viejo apartamento, pero tomaba demasiado tiempo para subir (upload) videoclips de alta definición para el blog.


'Eso definitivamente nos llevó a otro nivel. Yo nunca he considerado regresar', djo.


En cuanto a los Paulk, ellos están considerando mudarse de nuevo, pero no para tener una conexión de broadband más rápida. Están considerando regresar a su antigua casa, que todavía está en su propiedad, porque allí está disponible el DSL desde hace un año.


'En mi opinión', dijo Adam Paulk, ``era perfecta en todo, excepto que no tenía internet de banda ancha'.