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  Por el libro
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Metro Puerto Rico

En momentos en que el Gobierno busca dinero hasta debajo de las piedras, el Departamento de Hacienda emitió el mes pasado una determinación administrativa que buscaría que los cocteles preparados que están de moda en el mercado de bebidas alcohólicas tributen como un “espíritu destilado”, cosa que hasta ahora no había sucedido.

La secretaria de Hacienda, Melba Acosta, firmó el pasado 9 de septiembre la determinación administrativa 14-21, en la que se reitera que la imposición de impuestos sobre las bebidas alcohólicas bajo el Código de Rentas Internas de 2011 deberá hacerse basada en el producto terminado. Esta determinación se realizó para aclarar que la Ley 77 de 2014, Ley de Ajustes al Sistema Contributivo, introdujo cambios en la definición de producto final, aclarando que en el cobro de impuestos al producto final de espíritus destilados “no se limita a la sustancia que se obtiene en el proceso de destilación que se describe en la Sección 5001.01 (a) (24) del Código, sino que también incluye las diluciones y mezclas de dichas sustancias o espíritus”.

A la pregunta directa de si esto aplica a los cocteles que ya se venden listos, el secretario auxiliar de Política Contributiva de Hacienda, Ángel Marzán, respondió por escrito en la afirmativa. El funcionario no quiso entrar a evaluar casos de productos específicos por la confidencialidad de la información contributiva de cada corporación.

La determinación de Hacienda especifica que “un licor, por ejemplo vodka o ron, que resulta del proceso de destilación y que claramente es un espíritu destilado se puede diluir y mezclar con agua, azúcar o sabores para desarrollar otro producto para venta y consumo en Puerto Rico, el cual continuará siendo un espíritu destilado y no perderá su esencia por razón de dicho proceso de mezcla y dilución”.
El pago basado en el espíritu destilado y no sobre el producto final, como aparenta haber estado sucediendo antes de esta determinación, podría redundar en millones de dólares en impuestos dejados de recibir en Hacienda.

Sin embargo, no todos los comerciantes interpretan el Código de Rentas Internas de la misma forma. José González, presidente de Pan American Grain, empresa que maneja la marca de cocteles Gasolina, indicó a Metro que con la determinación 14021 lo que el DH quería reiterar era que “tú no puedes hacer un ron, pagar el arbitrio y luego echarle agua y hacer dos botellas de ron”.

“El producto final es un espíritu destilado. La Gasolina es un coctel, no es un espíritu destilado. El espíritu destilado son cosas como ron, vodka, ginebra y otros productos, como whiskey. No puedes coger cien galones de ron, que es un espíritu destilado, echarle agua y hacer 200 galones de espíritu destilado. La ley de cocteles es otra. La ley de cocteles es un producto que no tributa como coctel, lo que tributa es el espíritu destilado, el vino que usas o el licor de marca que uses”, sostuvo González, que aseguró que mantiene sus impuestos al día con el DH y que nunca han tenido problemas con la agencia.

Empresarios de la marca Capriccio, que también prepara cocteles, no respondieron las peticiones de entrevista de este diario.