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  Estirando el chavito
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8 de noviembre de 2011

Canalpa

Los smartphones de gama alta de Nokia son "demasiado caros", según el director general de Telefónica encargado de dispositivos para Europa. Simon Lee-Smith ha indicado a Telecoms.com que los dispositivos premium de Nokia "todavía no tienen el precio adecuado", y añade que "si Nokia aspira a vender grandes cantidades, tendría que lanzar terminales competitivos en coste".

Lee-Smith afirma que Nokia "ha comenzado a escuchar" a las operadoras que son sus clientes y que confía que el fabricante finlandés ofrezca el año que viene unos terminales "más efectivos comercialmente". Indica que el problema se refiere tanto a los productos que ya llevan cierto tiempo en el mercado, como el N8 y el N9, como al recién anunciado Lumia 800, el nuevo smartphone emblemático de Nokia basado en Windows Phone 7.

Stephen Elop, consejero delegado de Nokia, afirmó en el Nokia World del mes pasado que el Lumia 800 se vendería a un precio de 420€, antes de impuestos y de subvenciones.

El fabricante también utilizó Nokia World para desvelar una propuesta renovada para los mercados emergentes, basada en teléfonos del tipo 'feature phone' con muchas funcionalidades y un precio bajo. "Espero que tengan éxito", declara Lee-Smith. "Necesitan poder subvencionar sus smartphones de gama alta, porque son demasiado caros".

Generalmente, las expectativas de los fabricantes de móviles sobre lo que pagarán las operadoras y los consumidores por sus smartphones son poco realistas, remacha Lee-Smith. "Todos los fabricantes de dispositivos parecen creer que un terminal de más de 400€ es la norma, pero no es así. Ni los clientes ni las operadoras pagarán tanto por un dispositivo que no sea lo bastante diferenciado".

Añade que no basta con limitarse a mejorar las especificaciones de los smartphones, asegurando que las operadoras en general, y Telefónica en particular, no van a pagar más simplemente porque los teléfonos de los fabricantes vengan con pantallas más grandes o con cámaras de mayor resolución. "No vayamos a dejar que la curva de tecnologías y costes se adelante a la de la demanda", indica.