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  Por el libro
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12 de febrero de 2006

WASHINGTON (AP) _ El nuevo beneficio de reembolso de las medicinas con receta está ayudando a la gran mayoría de los beneficiarios del seguro médico del estado, Medicare, aunque algunos pacientes han experimentado problemas, admitió el sábado el presidente George W. Bush.

"Cuando se hace un cambio tan grande en un programa que involucra a millones de personas, tiene que haber algunos desafíos", dijo Bush en su discurso semanal de radio. "Este ha sido el caso con la nueva cobertura de medicinas".

Bajo el seguro médico del estado Medicare, unos 43 millones de adultos mayores o inválidos son elegibles para inscribirse en un plan privado que les proporcionará fondos para medicinas con receta, subvencionado por el gobierno federal. Gracias a la competencia, el programa se está volviendo cada vez más barato para los beneficiarios y contribuyentes por igual, según Bush.

La prima promedio que pagan los beneficiarios al mes es de aproximadamente 25 dólares, en lugar de los 37 dólares que se habían proyectado el año pasado. El ciudadano mayor típico pagará alrededor de la mitad de lo que acostumbraba gastar en medicinas con receta, dijo el presidente.

Empero, el gobierno también estima que varios cientos de miles de beneficiarios de bajos ingresos han tenido problema en la transición al nuevo programa. Ellos habían estado obteniendo sus medicamentos a través de Medicaid, pero esos fondos se acabaron el 31 de diciembre. Se suponía que el gobierno los inscribiría automáticamente en un plan privado, pero muchos no fueron incluidos en el traslado. Otros se encontraron con que debían pagar más por la medicina que lo que debían según las reglas del nuevo programa.