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  Por el libro
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26 de marzo de 2006

Agence France Presse
SAN JOSE
La industria de los juegos electrónicos está muerta, opinaron varios pioneros en el diseño de estos programas de computadora durante una sesión en la Conferencia de Diseñadores de Juegos en San José (California), en el corazón del Silicon Valley.

Chris Crawford, cuya experiencia como creador de juegos electrónicos se remonta a 1979, cuando empezó a trabajar para Atari, pareció firmar la sentencia de muerte de esa industria y varios colegas no se quedaron atrás a la hora de dar la señal de alarma sobre la realidad del sector.

'No se puede hacer nada por la industria de los juegos (electrónicos) porque está muerta', se lamentó Crawford. 'Es un cuerpo en el que aún late el corazón, pero esencialmente tiene muerte cerebral'. El futuro, según el experto, está en el relato de historias de forma interactiva.

'Los juegos son sobre cosas, mientras que las historias son sobre la gente', dijo el diseñador ante una audiencia de 500 personas, muchos de los cuales estuvieron de acuerdo con Crawford y sugirieron incluso cómo podría resucitarse la industria.

Seamus Blackley, un diseñador de juegos en la Creative Artist Agency, opinó que la falta de sentido empresarial de los creadores atenta contra la creatividad, porque los creadores deben apelar a los editores corporativos para comercializar sus ideas.

'Tenemos ideas estupendas', dijo Blackley. 'Lo que pasa es que no hacemos buenos negocios con esas ideas'. Según este diseñador, la industria de los juegos debería ser como la del cine, en la cual surgen filmes independientes como Brokeback Mountain.

Otros panelistas atribuyeron la muerte del sector a la falta de innovación. Jonathan Blow, un creador independiente, dijo que la mayoría de los juegos nuevos eran viejos juegos con diferente diseño gráfico. Los juegos también tienen que atraer a la gente emocionalmente, dijo.

'Necesitamos hacer juegos que interesen tanto a la gente que no puedan no jugarlos', agregó. ``Debemos poner sentimientos en los juegos'.

La sesión de quejas, tradicional en la conferencia anual, estaba prevista como una oportunidad de identificar los problemas de la industria.

'Basta de quejas', instó Robin Hunicke, uno de los diseñadores de la popular serie de juegos Sims de Electronic Arts.