26 de mayo de 2006

WASHINGTON.- El secretario de Asuntos de Veteranos de Guerra, Jim Nicholson, dijo ayer que trata de averiguar por qué su departamento tardó dos semanas en dar a conocer el robo de datos personales de 26.5 millones de veteranos, y declaró al Congreso que estaba "furioso" porque no se lo informaron inmediatamente.

Nicholson reconoció en el interrogatorio que su subsecretario, Gordon Mansfield, fue el funcionario de mayor jerarquía que supo del robo sucedido el 3 de mayo, pero no tomó medidas. Pero se negó a responder si Mansfield será destituido o por qué mantuvo silencio ante semejante violación de la seguridad.

"El empleado denunció el robo sin demora a la policía local y el Departamento de Asuntos de Veteranos. Pero a mí no me informaron sino el 16 de mayo", dijo Nicholson. "Como veterano, estoy indignado".