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  Por el libro
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4 de septiembre de 2006

Una de las realidades que está enfrentando el Puerto Rico de hoy es que cada día se está convirtiendo en un país de envejecíentes pobres. En www.doctorshoper.com hemos dejado claro que la reforma contributiva va a perjudicar directamente al consumidor de edad avanzada, una población que vive mayormente de algún tipo de pensión o de ayudas del gobierno y que sus ingresos no han aumentado pero sí sus gastos. Qué queremos decir con esto. Que los envejecientes han tenido que recurrir a la utilización del crédito, en especial a las tarjetas de crédito, para poder costear sus necesidades básicas creando un nivel de endeudamiento insostenible y teniendo que recurrir a la radicación de quiebras.

Según estudio publicado por el "National Consumer Law Center", titulado en su primera parte "The Implications of Rising Credit Card Debt Among Older Consumer", reflejó que en EE.UU., el promedio de la deuda de los consumidores entre las edades de 69 a 69 años creció un 217% desde 1992 a 2001. Es por esto, además de otras razones, que la radicación de quiebras por los consumidores de edad avanzada ha ido aumentando dramáticamente. Esta situación no ocurre porque los consumidores tienen más deuda que cuando eran mas jóvenes, sino que es tener deudas que no se pueden costear. Es por eso que muchos envejecientes están utilizando las tarjetas de crédito para realizar compras esenciales que si no fuera por la tarjeta no podrían hacer.

Las razones más importantes para tener que utilizar una tarjeta de crédito y endeudarse, son reducción del valor adquisitivo de sus ingresos, aumento de sus gastos como vivienda, servicios de salud, utilidades como agua y luz e impuestos. Las prácticas de la instituciones prestatarias que empujan a los consumidores a coger prestado más allá de lo que pueden.

Aquí algunas de las practicas específicas pero peligrosas que resume el estudio que afectan a los consumidores envejecientes, como son los altos costo del crédito; los cargos punitivos por pagar tarde ($32 en algunos casos), que en 2004 generaron $24.4 billones en ingresos; aumentarle la tasa de interés que paga arbitrariamente y en la mayor parte de las veces retroactivas, debido a que pago tarde o bajó su puntuación de crédito, entre otras razones; la utilización de tácticas de mercadeo como "Bait and Switch" o "Downselling"; cambios en los límites de crédito y prácticas abusivas de cobro.

El estudio refleja que uno de los obstáculos que encuentra el consumidor envejeciente es la falta de educación en el manejo de su dinero de acuerdo con las realidades financieras actuales donde existe una gama de productos complejos y con una cantidad de tretas y cláusulas muchas veces difícil de entender y en muchas ocasiones hasta leer, ya que las letras son tan pequeñas que sólo con lupa se pueden leer.

El estudio sugiere ciertas recomendaciones como, prohibir el cobro de intereses retroactivos, prohibir las penalidades que no estén directamente relacionados con la tarjeta que posea, aumentar la línea de crédito sin haber solicitado el aumento de la misma entre otras recomendaciones

Pero para www.doctorshoper.com uno de los hallazgos más importantes del por qué mucho de las personas de edad avanzada están embrollaos, estriba en que todavía muchos de ellos están pagando por deudas contraídas en el pasado en beneficio de sus hijos, como educación, y esos hijos continúan en la lactancia económica.

En www.doctorshoper.com hacemos las siguientes recomendaciones:

1. Cancelar toda tarjeta que tenga intereses altos, en especial las de las tiendas.

2. Si su visión no le permite leer las letras pequeñas de la solicitud es indicio que no le conviene.

3. Utilice tarjeta de débito si por seguridad no quiere caminar con efectivo.

4. Si no solicitó una tarjeta de crédito y le llega, tritúrela y échela al zafacón.

5. Empiece a ocupar a sus hijos en cuestiones monetarias, que bastante que lo hicieron con usted.

6. Si le presta dinero a sus hijos, y éstos no le responden, pásele la factura.

7. Si tiene ahorros, salde las tarjetas. Es mejor economizarse el pago de 29% de interés que ganarse el 5% en ahorros.

8. No se meta en situaciones económicas que no le corresponde.

9. "Cántase" sin un peso, que eso está de moda.

10. No le de la firma como codeudor a nadie.

11. Si no puede manejar la situación y le está afectando a su salud, considere la quiebra, ya que nadie se ha muerto por recurrir a ella pero sí por un infarto por preocuparse de que no puede pagar.