2 de agosto de 2007
El Vocero
Las empleadas del comedor de la Escuela Vocacional Miguel Such decomisaron cerca de 100 fardos de arroz porque tenían gusanos.
Así lo constató EL VOCERO al tener acceso al almacén de este comedor y corroboró que los fardos de arroz, completamente sellados, tenían gusanos. Es decir, los fardos se tuvieron que decomisar sin haberlos utilizado ni una sola vez.
"Estuvieron todo el verano almacenados en este lugar, el Departamento de Educación (DE) tenía que mover estos fardos a otro lugar con ventilación y aire para evitar que se dañaran", dijo una empleada del lugar que no quiso ser identificado por temor a represalias.
Los fardos decomisados contenían 25 libras de arroz por los que el DE paga unos $8.50 por cada uno. EL VOCERO solicitó a la Autoridad Escolar de Alimentos del DE información detallada del total de fardos de arroz decomisados en todos los comedores escolares, pero al cierre de esta edición el DE no pudo proveer la información. Se nos indicó que durante el día de hoy se proveería la misma.
Sin embargo, fuentes ligadas a este proceso aseguran son cientos los fardos de arroz decomisados en todos los comedores pues la gran mayoría los dejaron almacenados en las escuelas.
El Departamento de Salud específicamente Salud Ambiental es el encargado de decomisar esta comida, sin embargo, tampoco pudo proveer a este diario la cantidad exacta de fardos decomisados en los comedores escolares.
De otro lado, en este comedor las empleadas no cuentan con el equipo necesario para proveer un servicio de calidad a los miles de estudiantes que estudian en este plantel.
Solo cuentan con una nevera pues las otras dos están dañadas, asimismo el freidor está completamente lleno de moho al igual que las hornillas de las estufas.
Los mosquitos son la orden del días porque las telas metálicas en las ventanas están rotas. Las empleadas pidieron al DE asigne más personal porque solo hay tres personas para atender toda la matrícula.
En el almacén apenas hay compra para iniciar este año, no obstante, las empleadas reconocieron que el DE pudiera estar enviando los alimentos el próximo viernes pues las clases inician el miércoles, 8 de agosto.
Las empleadas denunciaron además que el baño del lugar se inunda y está en pésimas condiciones.
En el pasado los comedores escolares han decomisado cartones de jugo de china, de piña, de uva y jugo de frutas, entre otros. Asimismo galletas expiradas, leche UHT, spaguetti y ravioli también han tenido que decomisarse porque han expirados. Por esta práctica el DE ha perdido miles de dólares de fondos federales.
