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  Estirando el chavito
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CNN Expansion

En un restaurante

Ya sea un restaurante abierto las 24 horas o una parrilla de cinco estrellas, la mayoría de los restaurantes tratarán de maximizar beneficios siempre que sea posible.

“Los restaurantes tratan de obtener lo más posible de ti”, dijo el director de estudios empresariales y de gestión culinaria en el Institute of Culinary Education, Stephen Zagor.

Zagor debe saberlo. Asesora a una gran variedad de restaurantes de todo el país sobre la forma de hacer precisamente eso. He aquí sus consejos sobre cómo evitar algunos de los trucos que los restaurantes utilizan para hacerte gastar más.

Estudia la ubicación del menú: Muchos menús son elaborados estratégicamente. Cualquier cosa que esté destacada con una tipografía más grande o ancha, por ejemplo, o encerrada en un marco, es algo que el restaurante quiere que pidas, típicamente porque genera mayores ganancias, dijo Zagor.

Para encontrar las mejores ofertas, busca elementos más sutilmente colocados, como aquellos que están a mitad de la lista.

Ten cuidado con los extras: Desde refrescos y cocteles de lujo hasta un acompañamiento o un postre al final de la comida, los artículos extra a menudo vienen con un sobreprecio e incrementan la factura promedio del restaurante. “Los restaurantes utilizan esos elementos para realmente tratar de elevar sus beneficios”, dijo.

Evita los ingredientes adicionales: ¿Quieres pollo a la parrilla o camarones en la ensalada? Eso te va a costar. Estos artículos también tienden a venir con un sobreprecio.

Explora la lista de vinos: El vino y otras bebidas alcohólicas son uno de los elementos que mayor precio tienen en un restaurante. Sin embargo, no todo el alcohol es un mal negocio.

De acuerdo con Zagor, un número creciente de restaurantes coloca algunos “excelentes vinos de valor” en su lista de vinos. Estas botellas se venden por mucho menos que el margen de beneficio típico de dos o tres veces el precio minorista.

Para encontrarlos, pregunta a tu camarero sobre el “mejor valor de la casa” o utiliza tu confiable teléfono inteligente para investigar los precios minoristas antes de ordenar.

 

En un centro comercial outlet

Sí, los outlets o centros comerciales de tiendas de ofertas son el paraíso de un cazador de gangas. Pero no todas las ofertas son iguales.

Aunque los minoristas típicamente venden la mercancía sobrante y fuera de temporada en los outlets, un número cada vez mayor son bienes de menor calidad para ser vendidos exclusivamente en esos lugares, dijo un analista en jefe del sector minorista de NPD Group, Marshal Cohen. Estos artículos pueden ser de algodón en lugar de lino, por ejemplo.

Aquí describe cómo detectar la diferencia:

Revisa las etiquetas: Debes estar atento a pequeños símbolos en la etiqueta. Por lo general, eso es una señal de que el artículo ha sido fabricado directamente para esa tienda outlet. J. Crew, por ejemplo, marca la etiqueta de los artículos "hechos para outlets" con dos pequeños diamantes.

Busca los estantes de liquidación: En la mayoría de los casos, debes ser escéptico ante cualquier artículo que la tienda tenga en una amplia variedad de existencias, dijo Cohen.

Para encontrar los mayores descuentos busca objetos solitarios escondidos en los estantes de liquidación en la parte trasera de la tienda.

Compra fuera de horario: El Better Business Bureau recomienda llegar a los outlets temprano en la mañana, ya que las mejores mercancías pueden moverse rápidamente. También aconseja comprar en final de temporada, como en marzo y agosto, cuando el inventario sobrante es llevado desde las tiendas minoristas.

En el gimnasio

Suscribirse a una membresía en un gimnasio es como comprar un coche: el precio anunciado raramente es la mejor oferta.

“Lo que tú ves no es necesariamente la única oferta que tienen, (pero) creo que la persona promedio simplemente lo toma”, dijo un entrenador personal asentado en el área de Seattle que ha trabajado en dos pequeños gimnasios de propiedad familiar y en amplias cadenas, Jesse Stoddard.

Estos son algunos de sus consejos expertos para conseguir la mejor oferta:

No pagues cargos extra: Muchos gimnasios cobran llamadas cuotas de inscripción por alrededor de 100 dólares o más cuando te suscribes, pero muchas veces no tienes que pagar ellas. Stoddard dice que estas cuotas a menudo son negociables, especialmente en temporada baja.

El momento es la clave: Si intentas suscribirte junto con la multitud en Año Nuevo, los vendedores del gimnasio tendrán menos incentivos para ofrecerte una mejor cuota o eximirte de esos cargos molestos. Lo mismo sucede a finales de la primavera, cuando muchas personas entran al gimnasio en anticipación del verano.

 

Para conseguir las mejores ofertas, intenta inscribirte en las temporadas muertas como agosto o diciembre.

No te dejes engañar por los beneficios extra: Desde regaderas de lujo hasta una piscina de entrenamiento, estas instalaciones pueden elevar el costo de mantenimiento de un gimnasio, y a su vez el costo de tu membresía. Si no crees usar realmente esas instalaciones, trata de buscar un lugar más austero.

En el supermercado

Desde la forma en que están dispuestas las naves laterales hasta los estantes de venta, los empleados de las tiendas de abarrotes y supermercados emplean una serie de trucos para tratar de hacerte comprar y gastar más.

Pero con algunos comportamientos de compra inteligentes, puedes evitar un gasto excesivo y detectar las verdaderas gangas.

El mayoreo no siempre es mejor: Esa gran bolsa de aguacates a menudo no es más barata que comprar cualquier cantidad por kilo, dijo el fundador de The Grocery Game, un sitio web que ofrece comparaciones de precios de comestibles, Teri Gault.

“Creemos ciegamente que la bolsa grande significa un mejor valor”, dijo. “Ese no siempre es el caso”.

Mira arriba y abajo: Aunque los estantes de los supermercados son considerados un espacio de mercado premium, estudios han demostrado que las repisas más altas y más bajas a menudo albergan los productos más baratos o con descuento.

Ten cuidado con ofertas de 10 por $10 (y otras ofertas como estas): Estas tácticas de venta común pueden atraerte a comprar más frascos de pepinillos o latas de tomates que no usarás nunca. Esto es especialmente importante de recordar cuando estás lidiando con productos perecederos, como el queso o el yogur.

“Por lo general, no tienes que comprar los 10 productos para conseguir la oferta, pero piensas: 'Tal vez pueda usar más de esto de lo que pensaba'”, dijo el autor de Priceless: The Myth of Fair Value and How to Take Advantage of It, William Poundstone.

Para detectar los mayores descuentos, busca las ventas que realmente tengan un límite en artículos que puedas comprar, dice Gault.

Al comprar en línea

Puede que los grandes minoristas en línea hayan construido su nombre al ofrecer precios más bajos que sus competidores de tiendas físicas, pero aun así debes asegurarte de que estás consiguiendo el mejor precio.

Cuidado con “la regla de los tres”: la economía conductual dicta que cuando se nos ofrecen tres opciones de precios, somos más propensos a elegir el elemento de mediano precio.

Muchos minoristas aprovechan esta tendencia, y ofrecen tres opciones distintas con la esperanza de hacer que gastes más, dijo Poundstone.

Así que, si te sientes atraído por la opción de en medio, detente y piensa acerca de tus objetivos y presupuesto original de compra.

Prueba con un segundo navegador: gracias a las cookies que rastrean tu historial web, muchos minoristas en línea saben lo que has estado buscando o lo que has comprado incluso antes de que hayas visitado su página. En algunos casos, pueden utilizar esta información para ofrecerte un precio más alto (o más bajo) que el que es ofrecido a otros consumidores, dijo Poundstone.

Si piensas que este podría ser el caso, utiliza un navegador web diferente para verificar el precio antes de comprar.

Prueba el truco del carrito de compra abandonado: a veces puedes utilizar esos sofisticados sistemas de seguimiento para tu ventaja.

¿Tienes puesto el ojo en un producto caro? Colócalo en tu carrito de compras. Luego inicia el proceso de compra con tu dirección de correo electrónico, pero no completes la compra.

En respuesta, algunas tiendas tratarán de seducirte con un correo electrónico posterior que ofrezca beneficios añadidos, como el envío gratis o un porcentaje de descuento en tu compra.