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  Por el libro
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13 de diciembre de 2011

Servicios Combinados

La solicitud de bancarrota de AMR Corp. puede abrir la puerta para rechazar los alquileres de costosos pequeños jets y hacer cortes más profundos en los vuelos en American Eagle, la unidad regional de American Airlines.

"Si vas a entrar en el Capítulo 11, tienes también que arreglar lo que está roto", dijo Jeff Kauffman, un analista de la firma neoyorquina Sterne Agee & Leach Inc. "Y lo que está roto es el producto Eagle".

Los viajeros en los transportes Eagle hacia y desde los centros aeroportuarios, como Miami International y Fort Lauderdale-Hollywood International, suministran más del 90 por ciento de los pasajeros a AMR’s American, la tercera mayor empresa de transportes de EEUU.

El solicitar la protección de la corte puso fin planes para una filial, mientras le da a AMR, con sede en Fort Worth, Texas, espacio para reestructurar una empresa que fue señalada para reducción de capital tan temprano como en el 2007.

Eliminar los jets con 50 o menos asientos está entre los posibles pasos de bancarrota, dijo Kauffman en una entrevista. AMR también puede reajustar los contratos laborales y los alquileres de aviones, y agregar aparatos con 70 o más asientos en Eagle, un paso al que se resisten los pilotos de American, quienes desean mantener esos empleos bien pagados en la aerolínea mayor.

"Ellos saben que tienen que deshacerse de Eagle y ahora la presentación del Capítulo 11 les permite hacerlo más rápido", dijo Michael Boyd, presidente del grupo consultor Boyd Group International, en Evergreen, Colorado. "Ellos desean que la tía loca se vaya del desván".

La próxima cita de AMR en la Corte federal de Bancarrotas en Nueva York es mañana, cuando la compañía tiene programado buscar la aprobación de los procedimientos para resolver ciertos reclamos de los abastecedores. American declinó discutir sus planes para Eagle, que también da servicios en Cayo Hueso y en muchos destinos en las Bahamas y el Caribe.

"El estatus futuro de la red regional es totalmente una función de AMR y las decisiones estratégicas de American", dijo Tim Smith, un portavoz de American. "Esos resultados no se conocerán por algún tiempo".

Eso no ha detenido al capítulo de Eagle en la Asociación de Pilotos de Aerolíneas (ALPA) de alertar a los miembros de las próximas reducciones en una flotilla que tenía 299 aviones el 30 de septiembre. La administración evalúa "todos los alquileres de aviones y los arreglos financieros", dijo Tony Gutiérrez, presidente de Eagle ALPA, en un mensaje de la semana pasada al sindicato.

AMR sacó a Eagle del grupo en el 2008, luego de no poder encontrar un comprador; revivió en el 2010 un estudio sobre el futuro de la división; y decidió este año hacer un producto derivado. Bajo la bancarrota, el plan era que American fuera dueña de los aviones y se los alquilara a Eagle mientras mantenía los más de $2,000 millones de deuda conectados con la aerolínea. American sería capaz de buscar socios regionales más baratos, y Eagle estaría libre para volar para otras compañías de transporte.

Uno de los desafíos de Eagle es tener el 72 por ciento de sus aviones con 50 o menos asientos – una categoría cuyos costos se han elevado después de un aumento de casi seis veces en los precios del combustible para los jets durante la pasada década.

Delta Air Lines Inc. dijo en el 2009 que buscaría deshacerse de casi tres cuartas partes de su unidad Comair de aparatos de 50 asientos.

"American se encuentra exactamente en la posición equivocada de la composición de la flotilla", dijo Tim Campbell, quien administraba las operaciones regionales de Northwest Airlines Corp. antes de la adquisición en el 2008 por Delta y ahora es presidente de Mountain Vista Consulting LLC en St. Paul, Minnesota. "Cincuenta asientos y menor no es el futuro".

Delta y Northwest restructuaron ambas las operaciones locales bajo la protección de la corte. La reducción de Delta, con sede en Atlanta, incluyó reducir las salidas en Cincinnati, un centro de vuelos regionales, en un 26 por ciento en el 2005.

La solicitud de protección bajo el Capítulo 11 por parte de Northwest ese mismo año provocó que un asociado, Pinnacle Airlines Corp., sacara un 11 por ciento de sus aviones fuera de servicio, y que otro, Mesaba Aviation, se colocara bajo la protección de la corte. Northwest también creó la unidad Compass con jets de 76 asientos volados por pilotos a los que se les pagaban salarios de aerolíneas regionales.

Incluso sin una bancarrota, Eagle de AMR se enfrentaría a un cambiante paisaje de aerolíneas regionales marcado por aviones más grandes, consolidaciones y demandas de lo grandes transportistas por un servicio de menor costo, dijo Campbell.

SkyWest Inc. compró el año pasado ExpressJet Holdings Inc., Republic Airways Holding Inc. trata de imaginar qué hacer con su Frontier Airlines que pierde dinero y Pinnacle contrató la semana pasada consejeros para negociar concesiones de los arrendadores, prestamistas y sindicatos.