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  Por el libro
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El Vocero

Las enmiendas añadidas a última hora al proyecto 1189 del Senado, que persigue cambiar la tributación de vinos locales serán derogadas tan pronto como en enero a través de enmiendas técnicas. Estos cambios devolverán a 2 millones de galones el tope máximo de producción por empresa.

El cambio surge luego que trascendieran denuncias de sectores del vino sobre alegaciones de que el lenguaje de la medida beneficiaba a los productores de cocteles, que habrían cabildeado en la Legislatura, específicamente el controvertible empresario José González Freyre, quien produce y distribuye los empaques de bebidas alcohólicas marca Gasolina.

De hecho, los productores locales de vino han objetado que no se les escuchó, ni consultó, previo a la aprobación del proyecto en la Cámara y el Senado. Por el contrario, alegan que solo se escuchó la versión de González Freyre, que según la industria mantiene amplio acceso y fuertes vínculos con esta Administración, logrando –incluso- colar una enmienda de ley al filo de la medianoche en la pasada sesión ordinaria. Esta movida, según fuentes de esta misma industria, viola las propias reglas del Senado.

 

De hecho, también se alega que este empresario ha operado bajo el manto benéfico de Hacienda y la Legislatura, “quienes se han hecho de la vista larga, mientras el productor de Gasolina logra esquivar más de $30 millones en impuestos. Este señor ha pagado impuestos por lo que ha querido, interpretando la ley de impuestos a las bebidas a su manera exclusiva. Mientras tanto, los demás productores han tenido que pagar impuestos según las leyes de Puerto Rico. Es un comportamiento impropio en menoscabo del resto de la industria y de la salud fiscal del país. Esto tiene que parar y revertirse con urgencia”, dijo una fuente de este rotativo.

Otra fuente vinculada a la industria del vino rechazó las expresiones de Nadal Power catalogándolas como unas a favor de Panamerican Grain, compañía propiedad de González Freyre, y señalaron de ilegal el que esta continúe pagando por el contenido de alcohol y el resto de las empresas locales por el producto terminado. “Es completamente ilegal el planteamiento y fue resuelto así por los tribunales. No puede haber discrimen en una ley que pone a una entidad a pagar en una forma y a los otros de manera completamente distinta. Es una ley que se aprobó a espaldas de la industria y con el único consentimiento de José González Freyre. Esta persona influyó directamente con la concepción de la ley para que el único beneficiado fuera él. La ley se hizo justo para él y para favorecer su negocio en detrimento de sus competidores. Esto es completamente ilegal y se tiene que investigar más a fondo el rol de este hombre”, dijo la fuente que solicitó mantenerse en el anonimato.

 

 

El presidente de la Comisión de Hacienda del Senado, José Nadal Power, aseguró a EL VOCERO que en reunión con varios de los componentes de la industria empeñó su palabra asegurándoles que efectivo en enero radicará las enmiendas en cuestión.

Igualmente sostuvo, que se reunirá con todos los componentes de la industria para llegar a establecer una disposición legal tributaria que equipare productos muy similares en su composición.

“No queremos que categorías muy similares tributen tan distantes unas de la otras. Perseguimos crear equidad de manera que no existan reglas distintas de juego para productos similares. Queremos incentivar la industria no destruirla. Actualmente existen iguales categorías que están pagando tasas abismalmente distintas y queremos nivelar el campo de juego de manera que se eliminen las disputas. En la próxima sesión ordinaria radicaremos las enmiendas técnicas pertinentes, de manera que no se afecte nadie en el proceso. Nos inclinamos en que todos los segmentos de la industria tributen por producto terminado”, sostuvo el Senador.

 

Entre los señalamientos que están en suspenso queda por verse el modo en que tributaran los productores de vino versus los productores de cocteles. Acorde con las enmiendas, la empresa que produzca más de 400,000 galones (en adelante 2 millones) de vino al año ya no cualificará para el impuesto sub-normal de $2 el galón, cuantía que tendría un alza de 92% al tributar en otro renglón al $12.50 el galón. Sin embargo, los productores de cocteles no tributan por producto terminado como el resto de la industria sino por la importación del ron con el que producen el coctel, lo que minimiza marcadamente la tributación.

Ante esto, el Departamento de Hacienda reiteró que ante el ordenamiento vigente y una determinación administrativa las bebidas en la categoría de cocteles también tributan a base del producto final. En una investigación realizada por EL VOCERO se pudo constatar que en efecto hace escasamente dos meses fue emitida una determinación administrativa a esos efectos, la cual no parece haber entrado en vigor en las empresas, ya que las mismas siguen tributando por licor utilizado como materia prima y no por producto terminado. Sin embargo, se pudo constatar que Hacienda emitió avisos de investigación para solicitar información a las empresas productoras de cocteles.

No obstante, dichas productoras se sostienen en que los cocteles no son espíritus destilados dado la limitada cantidad de alcohol por volumen, y de imponerse un pago por producto final representaría un precio de venta incosteable.

La medida con el alza en la tributación a la producción local de vinos fue aprobada en ambas cámaras legislativas pero no ha llegado a la Fortaleza para la firma del Gobernador.